Logotipo de Revista Ecoguía

Revista Ecoguía. Noticias Ambientales y Ecológicas

Bogotá, Agosto 10 de 2010.- El avistamiento del mamífero más grande del planeta, es posible hacerlo cómodamente desde las renovadas instalaciones de la isla Gorgona, a donde cientos de estos cetáceos cada año llegan en su etapa reproductiva.

Con 70 metros de eslora, el Sea Voyager ofrece confortables condiciones de alojamiento y cinco días de diversas actividades, que van desde el buceo hasta el avistamiento de aves.

Por Diana Manrique Horta

Cuando Sir Arthur Conan Doyle escribió su novela El mundo perdido, describió en ella un lugar donde las montañas eran planas en su cima, vivían dinosaurios y habitaba un hombre prehistórico y caníbal. Por el año 1912 los relatos que este británico contaba en su obra parecían sacados únicamente de su imaginación, pero aquel exótico lugar sí existía, estaba en Venezuela, era la Gran Sabana.

La casona sin puertas y altos techos en palma de moriche, anuncia la llegada a Juan Solito. Así se llama el hotel de La Aurora, en homenaje a un viejo ritmo del Llano que se ha ido olvidando con el tiempo. Ni el nombre de la reserva ni el del hotel se leen en aviso alguno. Pero a medida que se van abriendo los broches de alambre de púas, después de dejar atrás el Totumo, la última vereda de Paz de Ariporo, aumenta la expectativa por llegar a una de las reservas naturales más grandes del Casanare.

Colombia por donde se recorra ofrece espectaculares y sitios de recreación y descanso. Sin ir tan lejos, saliendo de Bogotá por la autopista norte, en tres horas y media, aproximadamente, se llega a la hermosa Laguna de Tota, no sin antes recrear la vista a través de lindos paisajes que parecen más bien una “colcha de retazos” por la variedad de tonos y colores que ofrecen a propios y turistas.

Van en busca de un espectáculo único, irrepetible, inolvidable y reconciliador: Vivir el amanecer llanero desde los 5.530 metros de altura en la cumbre del pico Ritacuba Blanco, la máxima de la cordillera oriental enclavado en la esquina que une a Boyacá, Arauca y Casanare, un sueño que pocos logran vivir con sus pies sobre esa nieve.

El hermoso espectáculo natural que ofrecen las ballenas jorobadas en el Pacífico se repite. Desde Junio hasta Noviembre, los turistas, en particular quienes se desplazan hacia lugares como Bahía Solano, Bahía Málaga, Nuquí y Juanchaco, pueden deleitarse con los sorpresivos saltos y otras maniobrasde estos mamíferos, que se mueven en una especie de danza acrobática. Todo un reto para aquellos que intentan grabar estas imágenes en sus cámaras de fotografía o de video.

Subcategorías

EcoMarcas

30
May 2025

Transición energética se prende en Tunja

Con la planta fotovoltaica construida por el Grupo Veolia, Tunja avanza en el proceso de impulsar...

Leer más...

30
Abr 2025

RAP-E y Fundagedescol, aliados en la gestión eficiente de acueductos rurales

La Región Administrativa y de Planeación Especial (RAP-E) Región Central, en alianza con la...

Leer más...

28
Mar 2025

Río Medellín, cada vez más limpio

El aumento de oxígeno disuelto en el agua, la reducción de olores y la recuperación de espacios...

Leer más...

planetaazul2022

Ganadores Premio
Planeta Azul 2022