Bogotá, mayo de 8 de 2012. Colombia, un país donde todavía el 6% de su población carece de un servicio eficiente de energía, se proyecta como un líder en desarrollo energético de América Latina y el Caribe, así como exportador de biocombustibles.

Así se conoció ayer, durante la presentación de la estrategia Energía Sostenible para Colombia, iniciativa desarrollada en convenio del Ministerio de Minas con el BID y financiada por los fondos japoneses Especial y de Consultoría.

Durante el acto de presentación de la estrategia, el representante encargado del Banco Interamericano de Desarrollo ?BID- Javier Game, agradeció el apoyo del gobierno japonés y destacó la potencialidad de Colombia como productor de caña de azúcar y palma de aceite, materia prima de los biocombustibles.

El embajador del Japón en Colombia, Kazumi Suzuki, expresó su gran satisfacción por esta iniciativa y manifestó que su país requiere con urgencia aprovechar fuentes alternativas de energía.

Jorge Alirio Ortiz, director de Hidrocarburos del Minsiterio de Minas, mencionó entre los pilares de la política colombiana de biocombustibles, la producción de caña de azúcar, de palma de aceite y la búsqueda de otras fuentes agrícolas de este producto como son la yuca y la remolacha.

El funcionario precisó que las emisiones de gases de efecto invernadero de los biocombustibles producidos en Colombia pueden ser reducidas en un 74% y 83% al usar etanol de caña de azúcar y biodiesel de palma de aceite respectivamente.

Si todas las plantas existentes de biocombustibles en Colombia operaran a plena capacidad, se podrían reducir alrededor de 1.8 millones de toneladas de CO2 equivalentes por año. Esto representa alrededor del 3% del total de emisiones colombianas de CO2 en 2008, o al 8% de emisiones causadas por el sector de transporte en Colombia, concluye la investigación ?Evaluación del ciclo de vida de la cadena de producción de biocombustibles en Colombia?, que hace parte de los ocho estudios realizados en el marco de la estrategia ?Energía Sostenible para Colombia?.

Este estudio también demostró que hay un potencial de expansión considerable en el país, tanto para el cultivo de palma de aceite (4.001.000 ha) como de caña de azúcar (4.918.000 ha), al mismo tiempo que se identificaron áreas de enfoque aptas para la producción de materias primas para biocombustibles a nivel nacional.

Durante la presentación de la estrategia se destacaron características relevantes que hacen atractivo al país en materia de energía sostenible y que tienen a Colombia en la mira de los inversionistas internacionales. Una de ellas tiene que ver con que el país no sólo es atractivo por el potencial de sus recursos energéticos, sino por aspectos como la estabilidad jurídica, una condición fundamental para que los proyectos sean realidad bajo parámetros de viabilidad y sostenibilidad ambiental y social.