Bogotá., mayo 25 de 2010.- La segunda versión de la Feria Internacional del Medio Ambiente, FIMA, que se realizará en Corferias del 2 al 5 de junio, será el escenario utilizado por el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial (Mavdt) para mostrar el impacto de nuestra huella ecológica en la vida del planeta.

Asi se busca conocer el comportamiento de los diferentes sectores del país y generar acciones que repercutan de manera positiva sobre la demanda nacional de los recursos biológicos del Planeta.

Informes como el de Planeta Vivo 2008, elaborado por WWF, la organización mundial, Global Footprint Network y Zoological Society of London, revelan que el exceso de consumo global va en aumento y en consecuencia, se están desgastando los ecosistemas y acumulando desechos en el aire, la tierra y el agua. En la actualidad, a nivel mundial, ésta excede la capacidad regeneradora de la Tierra en cerca del 30%.

En el marco de FIMA se lanzará la calculadora de huella ecológica, la cual, por primera vez, utilizará datos sobre consumo derivados del censo nacional. El aparato permite identificar la huella de cada ciudadano y compararla con el promedio mundial para determinar cómo están nuestras acciones de consumo con respecto a la estadística global. Medir la huella ecológica es además una invitación a generar acciones que contribuyan a un estilo de vida sostenible.

Biocapacidad de la tierra no da más

Según Planeta Vivo, por primera vez en los años 80, la humanidad excedió la biocapacidad de la Tierra. Ésta se refiere a la capacidad de abastecer recursos renovables frente a la absorción de los residuos producidos por el consumo. Cuando la huella ecológica de un país supera su capacidad biológica hablamos de que es una nación ambientalmente no sostenible.

La no sostenibilidad en la utilización de recursos como el agua, pone en serio riesgo la biodiversidad y supervivencia del ser humano en la Tierra. Los Ingenieros A.Y. Hoekstra y P.Q. Hung del Instituto Internacional para la ingeniería hidráulica y ambiental y el Instituto para la educación del agua, desarrollaron el concepto de la Huella de Agua, un indicador en el cual se determina no sólo la cantidad de agua que consume una persona, sino de dónde viene y para dónde va.

Según datos del MAVDT, en Colombia una persona gasta en promedio 812 metros cúbicos de agua per cápita al año, es decir el equivalente aproximado a tres millones y medio de vasos de agua por persona. El promedio mundial es de 1,243 metros cúbicos.

La quema de combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas natural, representan el 45% de le la Huella Ecológica global. Las emisiones generadas por estos son causantes del cambio en la temperatura de la Tierra, razón por la cual las acciones al respecto son inminentes.